IN LAK'ECH - HALA K'IN (Yo soy otro tu - Tu eres otro yo)

IN LAK'ECH -  HALA K'IN

(maya)

Yo soy otro tu - Tu eres otro yo

"El sentido común es el conjunto de

prejuicios acumulados a través de los siglos".

Albert Einstein

Lo más importante es saber formular la pregunta correcta.

Porque esto nos lleva a la respuesta verdadera.

No es en el exterior de nosotros donde debemos buscar la solución al problema del ser humano, debemos buscarlo en el interior de cada uno.

Por eso sabernos formular la pregunta nos lleva a la verdad. 

El verdadero preguntar se da en el ser humano, por su férreo deseo de saber y de su voluntad para querer escuchar y recibir.

Y la voluntad se fe afectada por el ego. Por eso se escucha y se recibe lo que se quiere solamente, cuando lo que queremos oir no afecta nuestro ego.

Y la pregunta fundamental: ¿es el ego quien nos maneja emocionalmente? 

El ego es un ancla que nos mantiene atados a las emociones que son las que nos enferman y nos impiden salir adelante y nos impide hacer actos de amor y actos de bondad. 

El ego se nutre de nuestras emociones negativas, y vive de ese estado emocional que lo condiciona a estar presente y vivo.

Porque es lo que nos dice: estas bien... estas en lo correcto… si perdemos algo, es donde el ego reacciona y nos mantiene en un estado emocional negativo y se va retroalimentado el ego, sacando los prejuicios para jugar un juego de ganar-perder. 

Cuando nos damos cuenta que somos controlados por el ego, debemos trabajar nuestras emociones positivas.  

El miedo alimenta al ego y el miedo genera una bioquímica en el ser humano que alimenta a su vez a la oscuridad, al mal. 

Al perder el miedo, desaparece el pensamiento de que es afuera donde están las respuestas del ser; sin hacer la pregunta correcta, que es la esencia de nuestro ser, no seremos capaces de resolver internamente lo que nos pasa, porque la lucha es entre el alma inmortal y el ego humano finito. 

Cuando ya no nos permitimos tener miedo, es cuando el ser humano no temerá mas a perder nada. 

Esta es nuestra resistencia.  A través del amor. De la libertad real. 

Al cambiar al ser humano con actos de amor y actos de bondad, seremos capaces de ser realmente libres y responsables por nosotros mismos. 

Al no tener miedo, vamos dominando al ego y manteniéndolo a raya conscientemente. 

Y ante este no tener miedo del ser humano, es cuando rescatamos la verdad que nos han tenido secuestrada.

Es cuando los oscuros conocerán de que es capaz el ser humano libre realmente. 

Y no es un camino sencillo. Debemos trabajar interiormente cada uno. Difundir lo positivo. Alentarnos unos a otros.

Las emociones “positivas” son las que nos llevan a la realización personal: el amor, la gratitud, la bondad, la piedad y la humildad.

Todo esto positivo, son percepciones que mejoran el estado emocional de nuestro ser.

Y nos llevan a tener relaciones con los demás de ganar-ganar. 

Saber que al dejar el ego atrás somos mejores seres humanos y formamos parte de una hermandad, de una raza. 

Los Mayas expresaban ese concepto de unidad en su saludo diario, IN LAK'ECH (Yo soy otro tu), al que contestaban HALA KEN (Tu eres otro yo).

El ser humano es: alma, mente y cuerpo.

La verdadera batalla espiritual del ser humano es interior.

El ser humano no tiene que hacer un cambio, en realidad tiene que volver a sentir y que le importen los demás, sensibilizarse de lo que es ser humano y de que todos somos los demás, porque la única manera de cambiar es sentir.  

Por eso, debemos amar y sentir.  

La transformación está en nosotros mismos.

No podemos culpar a los demás de no evolucionar. 

No hemos podido lograr la unión del ser humano porque en nuestra mente siempre hemos entrado en conflicto con los demás y por el ego, hemos tenido codicia, envidia, vanidad, odio. 

Todo esto en vez del amor y de la bondad para ser una verdadera hermandad, una real humanidad. 

Para los chamanes Mayas y para su cultura viva y actual, una de las cosas más importantes en su vida es mantener y elevar el nivel de energía vital interna, pues su disminución hace perder la paz interior y lleva a estados de sufrimiento. 

Creen que respetando la naturaleza, y teniendo conciencia de los ciclos que esta genera, sabiendo como respirar, mantenernos alimentados sanamente, se logran niveles cada vez mayores de energía vital, y al encontrar este estado de paz interior, la energía acumulada pone en funcionamiento programas inactivos en el código genético, que producen los cambios físicos necesarios para comunicarse con el pensamiento, se genera en su mente un campo de energía sagrada, que activa la glándula pituitaria y pineal, esas glándulas segregan unas enzimas que activan Codones inutilizados en el código genético (Un codón es un triplete de nucleótidos. Es la unidad básica de información en el proceso de traducción. Cada codón codifica un aminoácido y esta correspondencia es la base del código genético que permite traducir la secuencia de ARNm a la secuencia de aminoácidos que constituye la proteína. Esto es medicina molecular). 

El progreso espiritual se efectúa por medio de la glándula pineal, y el progreso psíquico espiritual se efectúa a través de la glándula pituitaria. 

Vamos encontrando la verdad del ser humano y de cómo funciona nuestra evolución.

Estamos encontrando el manual de combate contra la oscuridad.

Ahora sabemos que el amor es la clave, no es una simple frase o buen deseo. Es real.

El amor produce Luz y la Luz es energía vital.

Es lo que nos alimenta el alma inmortal.

Es los que nos hace seres humanos. 

Vamos adelante.

Cada día somos más los seres humanos que queremos un mundo mejor.

Cada día se despiertan más seres humanos de la mala programación.

No tengas miedo jamás. 

Autor: Manuel Villarreal

Sobre este mismo tema, lecturas complementarias:

IN  LAK'ECH - HALA K'IN: Comprendiendo más      22/08/2015

IN LAK'ECH - HALA K'IN: LA VISIÓN DE LA ESPERANZA   28/06/16